Mientras tanto, en la otra punta del continente, el poderoso Atlético Nacional de Medellín recibía a Rosario Central en el Atanasio Girardot en Colombia.
Los rosarinos venían con la ventaja de 1 gol tras haber ganado en la ida. A los 9 minutos del primer tiempo, la gran estrella del “Gigante de Arroyito” Marcos Rubén mandó la pelota al fondo de la red desde el punto del penal, lo que obligaba al rival a marcar 3 goles.
El primer tiempo parecía terminar con una victoria parcial del conjunto del “Chacho” Coudet, pero Torres puso las cosas 1 a 1 a los 45’ (más 2 adicionales).
Luego del descanso, a los 50, Alejandro Guerra marcó el segundo gol del local. Aún con ese resultado, el “Canalla” seguía con un pie adentro de la próxima fase por su gol en condición de visitante.
Hubo un par de chances más para ambos bandos, pero ninguna terminó en gol.
Central se veía completamente rodeado y a la defensiva por un equipo que no paraba de atacar.
Cuando el árbitro adicionó 6 minutos más, el equipo de Medellín atacó más que nunca a un Central que venía soportando hace un largo rato.
Finalmente, de sorpresa y con un equipo argentino ya clasificado y un local afuera, en el minuto 5 con una espectacular y fantástica jugada individual de Ivarguen y un gran centro preciso, Berrío la empujó de cabeza en el arco de Sosa.
Con esto, el conjunto de Reinaldo Rueda no sólo lograba un puesto en semis, sino el poder de eliminar a uno de los mejores equipos de la Copa. Se convirtió en el héroe del partido.
Luego del gol, con un festejo bastante polémico al gritárselo al arquero rival, llegó la doble expulsión: Berrío y Musto por tratar de agredirlo.
Después, se adicionaron otros 2 minutos, en los que Central buscó el descuento. Quiso, pero no pudo más allá de un remate a colocar de Giovanni Lo Chelso que quedó expulsado por un codazo.
Al final, el Atlético Nacional festejó alegre y frenético ante un Rosario Central frustrado e inundado de bronca e impotencia, en lo que fue un partidazo de 2 titanes. Para muchos, fue más que un partido, se trató de otro capítulo apasionante de esta nueva edición de Copa Libertadores.
Ahora los cruces de las semifinales se darán entre San Pablo y Atlético Nacional. El rival de Boca Juniors se definirá entre un Pumas al acecho del título, o un Independiente Del Valle que viene dando el batacazo, en el deporte más maravilloso y apasionante que existe.