El actual presidente de los EE. UU., Donald Trump, fue nominado al Premio Nobel de la Paz por ayudar a conseguir un acuerdo de paz entre Israel y los Emiratos Árabes. Si bien alcanzó un acuerdo entre estos países, hizo muchas otras cosas que no son dignas para ser merecedor de ese premio. Es una persona racista, homofóbica, xenofóbica y transfóbica. Esto no lo decimos nosotras, esto lo sostiene gran parte del mundo y hay pruebas que lo demuestran.
Por ejemplo, Trump quiso aprobar una ley contra el despido de la comunidad LGBTIQ, quiso construir un muro que separe a México de Estados Unidos y mostró su desprecio hacia la comunidad LGBTIQ, hacia los extranjeros y también, hacia las personas de color.
En nuestra opinión, el presidente norteamericano no debería haber sido nominado, ya que como sabemos tiene muchos conflictos con algunos países de Asia, recordemos el temor de muchos a que por su causa, se produzca la Tercera Guerra Mundial. Además, pensemos, señor/a lector/a: si vela por la paz por qué quiere permitir el despido de la comunidad LGBTIQ, por qué no permite la entrada al país de algunos extranjeros y por qué permite que los policías opriman a las personas de color… ¿Alguien tiene alguna respuesta para todas esas preguntas? Es más, en estos últimos meses hubo mucho revuelo en la sociedad (y ya era hora), porque pudieron grabar el momento en el que un policía mató a una persona afrodescendiente solo por tener un color de piel diferente.
Actualmente, se están realizando los sondeos de las votaciones para elegir presidente que se desarrollarán dentro de poco y el candidato rival es Joe Biden quien está dispuesto a pelear contra el cambio climático y parece tener una ventaja de votos, debido a que además de tener el apoyo de muchas celebridades mostró tener un mejor plan de gobierno que el que se desarrolla actualmente y el crecimiento del país con el mandato de Trump no fue mucho, en nuestra opinión, ninguno.
Cuando nominaron a Donald Trump a los Premios Nobel de la Paz por conseguir un acuerdo de paz entre Israel y los Emiratos Árabes nos sorprendimos ya que, si bien evitó que se genere un desastre, no es una persona pacífica, no apoya a la comunidad LGBTIQ, es racista y xenófobo, no merece ser presidente nuevamente y mucho menos un premio nobel de cualquier categoría, menos que menos, de la paz.
Comentarios